Si os gustan los tacos, tenéis que venir sí o sí a comer a este pequeño restaurante y bar situado a pocos pasos de la Gran Vía. Como habréis adivinado, su especialidad son los tacos preparados según la receta milenaria ‘al pastor’, es decir, apilando la carne sobre un hierro giratorio frente a un fuego para que se vayan cocinando lentamente. Además de poder probar los sabores más auténticos de México, saldréis de aquí con la cartera casi llena ya que los precios son súper asequibles (tacos a un euro, quesadillas a 2,50 €, alambres a seis, etc.) No faltan tampoco las micheladas, los tequilas y las cervezas mexicanas.