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La ampliación de las terrazas se alargará hasta diciembre del 2021 como medida para reforzar el sector de la restauración, muy debilitado a causa de la pandemia y las diferentes medidas para contener los contagios como la prohibición de fumar en el espacio público siempre que no se puedan mantener los 2 metros de distancia o el aforo limitado en los establecimientos.
El consistorio ha eliminado 1.300 plazas de aparcamiento en Barcelona –792 plazas para coches y 569 plazas para motos– y ha habilitado 25.000 metros cuadrados para hacer posible las ampliaciones de terrazas, dando un nuevo uso a las calzadas y liberando espacio en las aceras para los peatones.
La medida ha permitido la ampliación de 2.000 terrazas, aunque el Gremio de Restauración apunta que la mayoría de solicitudes recibidas para ganar terrazas en Ciutat Vella y Gràcia han sido denegadas y sostiene que en algunos barrios la medida es más necesaria que en otros. Más de la mitad de las ampliaciones se reparten entre el Eixample, Sant Martí y Ciutat Vella, según el Ayuntamiento.