Torre d'Aigues del TIbidabo
Torre d'Aigues del TIbidabo | Torre d'Aigues del TIbidabo
Torre d'Aigues del TIbidabo

15 edificios que debes visitar en el 48H Open House BCN 2025

El 25 y 26 de octubre tenéis una cita con la arquitectura, con visitas guiadas a 100 espacios de la ciudad y alrededores

Rita Roig
Publicidad

Barcelona está llena de fachadas singulares y reconocibles. Pero, ¿Cómo es el interior de sus edificios icónicos? No hay duda de que nos gusta la arquitectura, por eso celebramos la nueva edición del 48H Open House Barcelona, que te abre las puertas de casi 100 inmuebles que descubras las casas particulares, las oficinas y las joyas arquitectónicas desconocidas de la ciudad. ¡Tendrás 48 horas para disfrutar de visitas guiadas gratuitas de la mano de arquitectos profesionales! Nosotros ya hemos decidido qué espacios queremos explorar por dentro.

NO TE LO PIERDAS: 25 joyas arquitectónicas de Barcelona

Clica aquí si quieres más información sobre nuestros estándares editoriales y nuestras directrices éticas para crear este contenido

1. Palacio del Marquès d'Alfarràs

Situado en el Parque del Laberinto de Horta, este edificio con más de mil años de historia ha pasado por diversas manos y usos. El resultado es un palacio de planta irregular, con planta baja, entresuelo, planta noble y buhardillas, cuyas fachadas confieren al conjunto un interesante juego de perspectivas.

Sus orígenes se remontan al siglo XI, cuando el edificio era solo una torre de vigilancia, y más tarde, a finales del siglo XIV, fue propiedad de Jaume de Vallseca, miembro de uno de los linajes más poderosos de Barcelona. Desde 1993, una parte del palacio ha sido utilizada por el Centro de Formación del Laberinto para impartir cursos y talleres de jardinería, agricultura y biodiversidad, y recientemente se ha abierto a la ciudadanía.

  • Qué hacer
  • Ciudad

Aunque el edificio se fundó para atender a los clérigos enfermos sin recursos de la ciudad de Barcelona, este hospital ha pasado por varias manos y ahora tiene una función muy distinta: es la sede de la Colección Casacuberta Marsans, una colección de arte hispánico, sobre todo de época gótica. En total, alberga más de 50 obras de arte entre pinturas, esculturas, cerámicas y objetos litúrgicos, distribuidos en los 600 metros cuadrados de este antiguo hospital, que cuenta con diferentes dependencias, una capilla, una sacristía y una cripta.

Contenido patrocinado
Publicidad

3. Casa Rocamora

Uno de los secretos de Barcelona. Escondida entre los jardines del Putxet, la Casa Rocamora es un palacete isabelino del siglo XIX que perteneció al pintor, escritor y coleccionista Manuel Rocamora i Vidal (1892-1976). El edificio, que alberga la sede de la Fundación Rocamora, conserva todo su esplendor original y es el hogar de más de veinte colecciones de pintura, cerámica de Alcora, indumentaria, mascarones de proa y reclamos publicitarios, como el cartel de Els Quatre Gats diseñado por Picasso o cuadros de Ramon Casas.

4. Arxiu de rajoles (Fàbrica Vilella)

Desde hace ocho años, Joel Cánovas es un cazador de baldosas: se dedica a salvarlas. Empezó este oficio por casualidad, cuando un día encontró un saco lleno de baldosas en el barrio de Gràcia y se lo llevó. Poco a poco fue acumulando más —siempre con el objetivo de conservar una pieza de cada modelo—, hasta llegar a 3.500 modelos diferentes y un total de 50.000 piezas. Ahora, la gran colección que ha reunido se encuentra expuesta en la antigua fábrica de sifones Vilella, en el barrio del Poble-sec.

Publicidad

5. Taller del escultor Pere Jou (Sitges)

Para entrar en este fascinante taller, tendréis que ir hasta Sitges. En la calle Prat de la Riba, 13 encontraréis este espacio diáfano que permite descubrir la obra de uno de los escultores de nuestro país. Jou se inspiró en el noucentismo, el mundo antiguo y el medieval para crear esculturas de talla directa: el espíritu de su arte se mantiene intacto en este estudio lleno de réplicas y piezas originales que pueden verse desde todos los ángulos posibles.

6. Cascada Monumental de la Ciutadella

En la zona del jardín romántico del parque de la Ciutadella se encuentra la Cascada Monumental, una construcción a la que se llega por caminos sinuosos y que data de 1888. Es todo un monumento de inspiración neoclásica que consta de un cuerpo central en forma de arco triunfal, dos escalinatas y una fuente elevada rodeada por un lago artificial de dos niveles. En la parte trasera de la cascada, hay una gruta artificial con un depósito de agua en la parte superior, en la que el Open House también te permitirá meter la nariz...

Publicidad

7. Las Mont-rogenques

Galerías, vidrieras de colores, suelos de mosaico hidráulico y bóvedas. Las Mont-rogenques son dos viviendas dentro de una casa unifamiliar del barrio del Farró, que había sido primero una construcción rural y, después, una casa modernista. La remodelación del espacio conserva elementos históricos del edificio sin renunciar a la modernidad, flexibilidad y sostenibilidad. El edificio consta de grandes portales que permiten acceder a salas centrales, comunicadas verticalmente entre sí, como un gran patio interior que vertebra la casa. Ah, y un dato importante: en la reforma, se inspiraron en las descripciones que Mercè Rodoreda hizo de su casa de nacimiento.

8. Reial Acadèmia de Ciències i Arts de Barcelona

El edificio que alberga la sede de la Reial Acadèmia de Ciències i Arts de Barcelona, fue reformado el arquitecto Domènech Estapà, quien le dio una nueva fachada y construyó dos observatorios que fueron predecesores del Observatorio Fabra, construido por el mismo arquitecto en 1094.

En el interior del edificio, destacan el Salón de Actos y las pinturas murales de Fèlix Mestres, y la Sala de los Relojes, con una colección espectacular de mecanismos como el reloj astronómico de Albert Billeter, ganador de la Medalla de Oro en la Exposición Universal de 1888. Posteriormente, la sala se convirtió en teatro, pasándose a conocer como Teatre Català de la Comè dia. Durante la Guerra Civil, la CNT-FAI lo ocupó y, despúes del conflicto, el Grup Balañà readquirió el teatro y lo rebautizó con el nombre de Teatre Poliorama.

Publicidad

9. Casa Rius

Un edificio modernista que el artista Josep Rius i Mestres, uno de los escultores catalanes más cotizados de la época, se construyó para alojar empresa y familia. Este complejo formado por el taller y un bloque de viviendas pasó a ser un almacén a principios del siglo XXI, hasta que la Fundación ACICAC (Agrupación de Casas de Innovación, Cultura y Arte de Cataluña) adquirió y restauró la casa para convertirla en un espacio de transformación creativa. Ahora se realizan eventos, residencias de artistas, espacios gastronómicos y una amplia programación cultural.

10. Arc de Triomf

Has pasado mil veces por debajo, segurísimo. ¿Pero has entrado alguna vez dentro? El Arc de Triomf es uno de los espacios visitables del Open House: diseñado por Josep Vilaseca para la Exposición Universal de 1888, la construcción es un arco triunfal que sigue las proporciones clásicas, pero con algunos materiales y algunos elementos ornamentales que permiten hablar de neomudéjar. Arriba, podrá contemplar una vista privilegiada de Barcelona. Y también podrá fijarse de cerca los relieves escultóricos de Josep Reynés (que representan la ciudad acogiendo a los visitantes) y de Josep Llimona (que simbolizan la entrega de galardones).

Publicidad

11. Vestíbulos de la Casa Sayrach y la Casa Montserrat

¿Habéis cotilleado alguna vez el vestíbulo de alguna finca del Eixample desde fuera? ¡Algunos son más interesantes que los espacios donde vive la gente! Entre barandillas de mármol recargadísimas, molduras, esgrafiados y baldosas de todo tipo, los vestíbulos cuentan historias de animales, paisajes e, incluso, personalidades barcelonesas. Con el Open House, puedes hacer una visita detalladísima a los recibidores de la Casa Sayrach y la Casa Montserrat, de inspiración gaudiniana, pero construidos cuando la mayoría de los arquitectos ya habían abandonado el modernismo.

12. Finca San Salvador

Una joya inacabada de Jujol hecha de ladrillo visto, cerámica y esgrafiados. Este conjunto arquitectónico modernista que se encuentra entre la calle Pineda y el paseo de la Virgen del Coll, en Gràcia. Únicamente se construyeron los cimientos, la casa del portero, las caballerizas, el jardín y las dos vallas en la calle, y las obras tuvieron que detenerse por el hallazgo de una mina de agua en el terreno, que propietario quiso explotar económicamente. En las galerías subterráneas de la planta embotelladora, Jujol diseñó varios arcos parabólicos de ladrillo visto: gracias al Open House las podrá recorrer.

Publicidad

13. Vivienda Passivhaus

Una 'casa pasiva' en Poblenou. Gracias a las aberturas en paredes, techos y armarios, la visita por esta singular vivienda le permitirá descubrir los seis principios de una casa pasiva: buena protección solar; buen aislamiento térmico y reducción de puentes térmicos; uso de ventanas eficientes; reducción de las infiltraciones de aire; y uso de ventilación controlada con recuperador de calor. El diseño es moderno y el espacio interior se fusiona con el exterior a través de grandes puertas de cristal, sin renunciar al uso de materiales de bajo impacto medioambiental y con una vida útil larga, que hacen reducir las emisiones de CO2 un 92% con respecto a una rehabilitación convencional.

14. Real Monasterio de Santa Maria de Valldonzella

Un monasterio modernista a los pies del Tibidabo. Santa Maria de Valldonzella es obra del arquitecto Bernardí Martorell i Puig. De ladrillo visto y de inspiración mudéjar y goticista, el conjunto incluye una iglesia con vidrieras y refuerzos ornamentales, el cuerpo adosado a esta, y las dependencias alrededor del claustro. Durante la guerra, el monasterio se reformó y amplió siguiendo el lenguaje originario, y pensando en instalar un sanatorio antituberculoso. Actualmente, todavía está en actividad: viven nueve monjas que siguen la vida monástica de la orden del Císter.

Publicidad

15. Torre de las Aguas del Tibidabo

Para acceder a este edificio, tendrás que hacer reserva previa, pero quizás te vale la pena por las vistas panorámicas que ofrece y su singularidad. Ganadora, en 1905, del Premio de Edificios Artísticos del Ayuntamiento de Barcelona, ​​esta torre abastecía de agua a la Colonia del Dr. Andrés. Está ubicada en el punto más alto de la ciudad (532 m sobre el nivel del mar). El depósito que hay en su interior es de 100 m³ y, para acceder cómodamente, la torre incorpora uno de los primeros ascensores eléctricos del Estado español.

Recomendado
    También te gustará
    También te gustará
    Publicidad