8 espacios en Barcelona que no son lo que parecen

El Pastrami Bar, en el Borne, es un bar de bocatas liderado por el cocinero Buster Turnofski, que pasea piezas de pescado y carne ahumadas artesanalmente en barriles de roble. La oferta es limitada pero excelente y, para beber, no hay cola ni vino, solo cerveza artesana que hace Buster cada semana. Y alerta, abre hasta las tres de la madrugada y si estiras una nevera de madera, que ocupa medio lienzo de pared, se abre una puerta hacia una coctelería. Y no cualquiera: El Paradiso, una elegante cueva delineada por lamas de madera donde manda Giacomo Gianotti, mejor coctelero de España en 2014.

Poca gente se imagina que, dentro de una academia de costura de la Ribera, un chef te puede cantar los platos del día. El de la Costurera lo hace con una voz tranquila y se detiene en detalles: ensalada de arándanos con mayonesa de shiitake, crema de calabaza, quinoa cocinada como un risotto… Es tan auténtico que te hace sentir como si te hubiese invitado a comer a su casa. De hecho, eso es lo que busca, porque no le gusta la palabra ‘restaurante’.