Dona i aspirador(a)
Las obras temáticas siempre corren el riesgo de que la materia tratada se acabe tragando la función y todo lo que le rodea. A veces, también pueden ser aleccionadoras y sales del teatro sintiendo que te han tratado de burro. Helena Tornero, sin embargo, es lo suficientemente hábil como para esquivar todas las dificultades que representa escribir sobre el ecofeminismo y no morir en el intento. Porque 'Dona i aspiradora(a)' habla, básicamente, de cómo una mujer que siempre ha sido sometida a los deseos de los demás toma conciencia del momento que vive el planeta y decide hacer algo. En escena, solo tenemos una actriz, Míriam Escurriola, que pone en marcha máquinas con el 'Express yourself' de Madonna y que nos acabará ofreciendo fragmentos del 'Aloma' de Rodoreda y el 'Desolació' de Alcover. Una lección de cómo empezar por arriba y llegar a la poesía. Ella es una mujer que trabaja como profesora de retórica en una empresa de marketing, pero también es hermana y, sobre todo, tía. Nos explicará, más o menos, su presente y nos ofrecerá pinceladas de su pasado, para hacernos entender cómo es que siempre se ha dejado llevar por la corriente. Una lección de cómo empezar por arriba y llegar a la poesía Llega un día, sin embargo, en el que se despierta y decide seguir los pasos de su sobrino activista. Y lo mejor es que, teatralmente, Tornero, que también dirige la obra, lleva hasta el extremo su propuesta medioambiental de forma muy coherente, diría que insólita. Cuando la veáis, lo e