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El modernismo es uno de los rasgos más significativos de Barcelona, con cientos de edificios de este estilo arquitectónico. Aunque algunos se han convertido en algunas de las atracciones turísticas más relevantes de la ciudad, como la Casa Batlló, otros todavía albergan viviendas, oficinas e incluso tiendas.
Este es el caso de la Casa Comalat, un impresionante edificio modernista de 1911 que, aunque no se puede visitar por dentro, sí permite acceder a su planta baja, que se ha convertido en una tienda de ropa única en Barcelona.
La planta baja del edificio acoge el primer establecimiento físico de Casa Bloom Barcelona, una tienda que funciona como un concepto que fusiona el arte contemporáneo y la ropa de lujo de segunda mano.
“Creemos que el futuro de la moda reside en dar una segunda vida a prendas excepcionales que ya existen. Nuestra misión es sensibilizar sobre el consumo responsable y atraer a personas preocupadas por la moda ética, sin renunciar al estilo y la calidad”, aseguran desde Casa Bloom Barcelona.

Si entras, podrás encontrar prendas de marcas como Céline, Chloé, Dior, Isabel Marant, Maje, Miu Miu, Sandro, Saint Laurent y Zadig & Voltaire, entre otras, que conviven con exposiciones de arte contemporáneo itinerantes también expuestas dentro de la tienda.
Hasta finales del verano, la exposición que puedes ver es ALSINA, una muestra del fotógrafo Joan Alsina con piezas que ya han sido expuestas en museos como el Reina Sofía de Madrid, el IVAM de Valencia y el Photo Basel de Basilea.

La Casa Comalat, una joya del modernismo catalán
La ubicación de Casa Bloom Barcelona no es casualidad, sino que el equipo buscó un espacio que representara su filosofía: dar al arte, la arquitectura y la moda la importancia que se merecen.
Finalmente, la tienda se inauguró en la Casa Comalat, una joya del modernismo catalán diseñada por Salvador Valeri i Pupurull, inspirado directamente por Gaudí. El edificio todavía conserva su característica ornamentación floral, los mosaicos y el trabajo de hierro forjado que hace que todo el que pasa por delante se detenga unos segundos a contemplarlo.

“De hecho, nuestro nombre viene de esos motivos florales de la fachada del edificio (…) combinamos la riqueza histórica del entorno con una selección actual de arte y moda de lujo para ofrecer una experiencia única en la ciudad”, asegura el equipo.
Aunque Casa Bloom Barcelona se encuentra en la planta baja de la fachada que da a la calle Còrsega, el edificio tiene otra orientada hacia la avenida Diagonal, completamente diferente de la colorida y ornamentada donde se encuentra la tienda.
La de la Diagonal es una fachada realizada totalmente en piedra, con las habituales curvas y detalles decorativos del modernismo, donde también destacan las formas orgánicas, los grandes balcones y una sobriedad que se aleja de lo que transmite la fachada de la calle Còrsega.
