Time Out en tu buzón de entrada

Buscar

Oscars 2019: 4 sorpresas y 1 decepción en las nominaciones

Escrito por
Josep Lambies
Publicidad

Ya se han dado a conocer las nominaciones a los Oscars y aunque falta más de un mes para la ceremonia nosotros no podemos resistir la tentación de empezar a opinar. Tendremos que esperar hasta la madrugada del 24 de febrero para descubrir cómo se reparte el pescado, pero aquí ya estamos calentando motores.

1. El calado de los #OscarsSoWhite. Hace tres años, Chris Rock presentaba una de las galas de los Oscars más beligerantes que se recuerdan, marcada por la polémica de los #OscarsSoWhite, suscitada por la ausencia de actores negros en las nominaciones. Parece que Hollywood no quiere volver a pasar por un bochorno similar. Al año siguiente, 'Moonlight' ganó como Mejor película. Y este año todavía van más fuertes: están nominadas al premio más codiciado 'Green book' (donde Mahersala Ali interpreta al pianista negro Don Shirley), 'Infiltrado en el KKKlan' (una caricatura con mucha mordiente del arraigo del racismo en Estados Unidos, dirigida por Spike Lee) y 'Black Panther' (con un casting eminentemente negro, donde destaca Lupita Nyong'o, que ya ganó un Oscar por '12 años de esclavitud').

2. 'Roma', un caso sin precedentes. La película de Alfonso Cuarón opta a diez estatuillas, incluyendo las categorías de Mejor película y de Mejor película de habla no inglesa. Solo cuatro veces antes se había dado una situación similar, y en ningún caso la película se había llevado el doblete. Las quinielas apuntan que 'Roma' podría hacer historia. Tengamos en cuenta dos factores. El primero, que es una película mexicana: tal y como están las cosas en la América de Trump podemos tomárnoslo como una declaración de intenciones por parte de la Academia. El segundo, que es una película realizada para Netflix. Si ganara, tendríamos que asumir que estamos ante la total consolidación de un cambio de paradigma en nuestra manera de consumir cine... si es que a alguien le quedaba alguna duda.

3. Lo del Mejor actor es muy previsible. El secreto para ganar el Oscar a Mejor actor sigue siendo pura fórmula. El año pasado ganó Gary Oldman por su interpretación de Winston Churchill en 'El instante más oscuro'. A ver si entendéis por dónde vamos. También Meryl Streep se llevó una estatuilla cuando hizo de Margaret Thatcher, igual que Eddie Redmayne cuando se puso en los huesos escleróticos de Stephen Hawking. En el fondo, cada uno de esos papeles era pura gimnasia imitativa. Y eso en los Oscars siempre triunfa. La idea es que si consigues un parecido razonable con alguien que ya existe tienes premio asegurado. Por eso, este año están nominados Christian Bale, con sus prótesis, encarnando a Dick Cheney en 'El vicio del poder', y Rami Malik, el clon de Freddie Mercury en 'Bohemian Rhapsody'

4. Pelea por ser la favorita. El viernes pasado se estrenó  'La favorita', la última película del griego Yorgos Lanthimos, director de títulos tan incómodas como 'Canino', 'Langosta' y 'El sacrificio del ciervo sagrado'. La historia ocurre en una corte inglesa del siglo XVIII, y ahí tenemos a Rachel Weisz y Emma Stone peleándose a cuchillo por ser la doncella favorita de una reina asquerosa, que suda, babea y vomita a la vez que se come un pedazo de pastel azul, rodeada de caca de conejo. Es exquisitamente grotesca. Tanto Weisz como Stone están nominadas al Oscar a Mejor actriz. Esperamos que en la ceremonia haya un duelo similar, físico y sangriento. Les exigimos lo mismo que en la película: un cuerpo a cuerpo despiadado. Y que gane la mejor. 

5. Nos alegramos por Sorogoyen. La verdad es que nos haría muy felices que la noche del 2 de febrero 'El reino' de Rodrigo Sorogoyen se llevara el Goya a la Mejor película. Para los que no la hayáis visto, es un thriller anfetoso que ofrece un retrato delirante y justo de la escoria política que durante mucho tiempo ha gobernado este país. Por el momento, estamos celebrando que su corto 'Madre' esté nominado en la categoría de Mejor cortometraje de ficción. Es una pieza tensa, angustiosa, que logra tenerte con las uñas clavadas a la butaca durante sus 20 minutos de duración. Ahora, Sorogoyen está trabajando para convertirlo en un largometraje. Tiempo al tiempo. Ahora solo podemos esperar que reciba todo el reconocimiento que merece.

Últimas noticias

    Publicidad