La Maruca, uno de los buques insignia en la capital del grupo cántabro Cañadío, cuenta ya con tres sedes, en Velázquez, Castellana y López de Hoyos. “Las bravas de La Maruca”, como figuran en su carta, se pochan antes de freírse, logrando una textura muy agradable y, una vez emplatadas, se cubren con tres salsas, brava y alioli entre ellas. Llegan coronadas con cebolla frita, que les da el toque crujiente perfecto.
El corte de la patata, la temperatura del aceite, la fritura, el secreto de la salsa… todo influye a la hora de preparar la ración perfecta de bravas. Un clásico de la hora del tapeo que en Madrid sigue protagonizando aperitivos y tardes de cañas. Precisamente en la capital podemos encontrar recetas que van desde lo canónico hasta la reinterpretación, ampliando las opciones de esta elaboración icónica. La selección que hemos preparado incluye referencias de toda la vida y también bares que se han hecho un nombre gracias a sus bravas, pasando por locales que innovan en su cocina sin perder el toque picante de este afamado bocado tradicional.
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