La decoración de la casa en Navidad (y en cualquier época del año) va más allá de los muebles y las plantas. Hablamos del perfume y al aroma para el ambiente, y si queréis que vuestros invitados lo recuerden tanto como los langostinos y el asado que os váis a comer en Nochebuena, id a Le Labo y preguntad por sus velas aromáticas o sus fragancias para el hogar. La boutique de perfumes de autor nacida en Nueva York (pero con alma francesa) cuenta con una selección super interesante de velas desarrolladas con una alta dosis de aceites aromáticos, una mezcla personalizada de ceras y mechas construidas con fibras naturales para asegurar una experiencia olfativa hermosa. ¿Lo más difícil? Elegir el aroma, pero para eso están sus novedades: Encens 9 o Santal 26 son dos de ellas, que llegan en un irresistible envase de cemento (formato mediano), que se suman a las versiones clásicas (en vaso de cristal o perfume de hogar). Dato curioso: todas las velas se vierten a mano en Estados Unidos y se presentan en la clásica caja kraft con etiqueta personalizada en el momento de la compra. Lo dicho, un capricho.