En el barrio de Malasaña y ubicada en pleno centro de Madrid, a escasos metros de la siempre bulliciosa Gran Vía, se alza esta taberna centenaria en la que manda el picoteo de calidad. Solo traspasar las puertas de La Ardosa, te trasladará de lleno a esos bares de antaño en los que azulejos y madera mandaban en la decoración y donde las barras exhibían cientos de botellas testigos imperecederos del paso del tiempo. Incluso llama la atención el pequeño espacio con mesas que tienen en la parte trasera, al que se accede pasando agachado por debajo de la barra de este mítico bar de Madrid.
Aquí, están especializados en recetas y tapas caseras, elaboradas como manda la tradición. Imprescindibles son su pincho de tortilla de patata (con un punto perfecto, poco cuajada en el centro), las croquetas de cabrales, carabinero, cecina o bacalao, el salmorejo cordobés y las alcachofas en flor que sirven confitadas y a la parrilla, con un poco de sal gorda por encima.
Además, fueron pioneros en traer a Madrid ciertas cervezas de importación, así que no te extrañe que allí la cerveza de grifo sea la checa Pilsner Urquell y que tarden un buen rato en tirarla. Son de servir las pintas lentamente y a la perfección. También cuentan con otras tantas para degustar allí mismo como Budweiser o Guinness. Si te va más el vermut, no puedes irte sin probar el de grifo que prepara una bodega en exclusiva para La Ardosa.
Historia
Para conocer su historia hay que remontarse al lejano 1892, cuando Rafael Fernández Bagena fundó la cadena de bodegas La Ardosa en Madrid, a través de las cuales comercializaría el vino que producía en la comarca toledana de La Ardosa. Décadas después, en los 70, tomaría el testigo Gregorio Monje, a quien le debemos poder seguir disfrutando de la taberna que hoy en día todos conocemos. La tortilla, famosa, deliciosa y entre las mejores de Madrid, es cosa de Conchita Marfil, su mujer. Sus hijos, Rafael y Ángel, también han tenido mucho que ver en el continuar de este negocio. Tanto que ahora es Ángel quien lo regenta.
Carta
Su carta es una fantasía que reúne todo lo que uno podría pedirle a un buen vermut con aperitivo. También a una comida. Y es que, la propuesta de La Ardosa va desde su famoso pincho de tortilla hasta conservas, pasando por embutidos y salazones y por platos como los callos a la madrileña, los buñuelos de bacalao o los huevos rotos con chanquetes. Y no, no se olvidan del postre, así que deja hueco.
¿Se puede reservar?
No, la bodega no admite reservas.
Dónde está
La Ardosa está ubicada en el número 13 de la calle Colón, en pleno barrio de Malasaña.
Cómo llegar
Llegar hasta ella resulta bastante sencillo. Es posible hacerlo utilizando el vehículo propio y aparcando en alguno de los parkings que encontrarás por la zona o, bien, optar por el transporte público. En este último caso, puedes tomar las líneas 1 y 10 de metro, hasta Tribunal; la línea 5, hasta Chueca; la 3 y la 5, hasta Callao; o la 1 y la 5, hasta Gran Vía. Si prefieres el autobús, las líneas 002, 3, 40 y 149 cuentan con parada cerca de esta bodega.
Horario
La Ardosa abre todos los días de la semana y lo hace en horario de 9 a 2 h, de lunes a jueves; de 9 a 2.30, los viernes; y de 10 a 2.30 h, sábados y domingos.
¿Tiene cuenta de Instagram?
Sí, tiene cuenta de Instagram. Puedes encontrarla en esta red social como @laardosamalasana y darte un paseo visual por su feed para ir abriendo boca de las delicias que podrás probar cuando la visites.
¿Cómo puedo contactar con ellos?
Puedes hacerlo llamando al número de teléfono 915 214 979 o enviando un email a la dirección de correo electrónico victor-laardosa@hotmail.es.
