Desde su coqueto puesto en el mercado de Vallehermoso, Micaela y Agustina Geminiani conquistaron el barrio y la ciudad entera. No solo tienen empanadas, hay una completa carta de cocina argentina casera. Vamos, la que comería un argentino a diario. La mezcla de influencias que define la tradición culinaria del país aquí es manifiesta y se traslada al comensal a través del mejor producto de temporada. Hay guiños a España, a Italia y a Perú en su selecto menú y también en sus famosas empanadas. 22 versiones. Querréis probar la de jamón, piña y Torta del Casar o la de ají de gallina aunque no podréis iros sin la de setas y trufa o la clásica de humita. Estamos con empanadas, sí, pero dejad hueco para el locro, guiso típico de alubias, maíz y carne, o para sus espectaculares milanesas.
Las hay gallegas, colombianas, peruanas, indias, árabes… Ningunas, eso sí, tienen tanta fama como las argentinas. Las empanadas pasaron primero por España desde Persia tras la conquista musulmana pero llegaron a América para quedarse y convertirse en receta nacional y hasta motivo de disputa entre los gauchos. Cada región allí presume de relleno y pretende convertirlo en el más famoso. En Madrid tenemos buenos representantes y no vamos a entrar al trapo. Nos encantan. Y las que veréis a continuación... más aún.