Arzábal Retiro
Arzábal Retiro
Arzábal Retiro

Tapas junto al parque del Retiro: una extensa selección para comer y beber

Quizás sea el barrio más gourmet y con la oferta más heterogénea para irse de tapeo (o a comer) en la ciudad. Descúbrelo con estas pistas

Gorka Elorrieta
Publicidad

Ya lo era hace unos años pero desde hace un tiempo no dejan de aparecer nuevas direcciones interesantes en Retiro para los que buscan una buena mesa o una barra con muchos atractivos. Tras el boom y declive de #ponzaning (sigue habiendo agujas en el pajar), el barrio de Retiro se confirmó como una de las zonas más amplias e interesantes para irse de tapeo. Hay opciones para todos los gustos. Aquí encontraréis algunas de las últimas aperturas y los clásicos infalibles.    

RECOMENDADO: Los restaurantes de moda ahora mismo en Madrid

  • Ibiza
  • precio 2 de 4
  • Crítica de Time Out
Tras afianzar clientela en Cachivache (Serrano, 221), los hermanos Aparicio apuestan por un nuevo local en la zona de Retiro, centro neurálgico del universo tabernario capitalino. Mantienen la informalidad de aquélla en la barra y suman un pequeño comedorcito para esos encuentros con sobremesa. Madera, ladrillo visto, mármol, metal… Su interiorismo, elegante, sobrio pero desenfadado, con buenas soluciones para un angosto espacio, lo firma el estudio Ping Pong Arquitectura.

El Capricho

Si no has estado en esta taberna ilustrada con varias décadas de historia a sus espaldas, no puedes decir que has ido de tapas por la zona de Retiro. Sus cañas bien tiradas, su servicio atento y esa oferta a base de productos reconocibles y platos para todos los públicos es algo que cada vez escasea más en la hostelería capitalina. Por eso los que conocen El Capricho (C/ Doctor Castelo, 14) no lo dudan cuando tienen que buscar un plan para ir a tomar algo rico -a precios populares- con la familia o los amigos. La zona de la barra y mesas altas suelen estar muy concurridas, al igual que su terraza, pero disponen de un comedor para aquellos que buscan una experiencia más reposada sin renunciar a la esencia del local. “Nuestra carta es casera y arrocera”, suelen decir sus responsables. De ahí que las tapas o raciones de arroz se despachen a un ritmo muy animado en cualquiera de los espacios con los que cuenta esta taberna tan bien defendida por Iván y el resto del equipo. Además de arroces (el de bogavante es el más solicitado), aquí se viene a devorar cocidos, carnes como el secreto o las carrilleras y, en general, platos mediterráneos de esos que nunca fallan.

Publicidad

Pazo Coruña

Todo un clásico del barrio, garantía de solvencia y de funcionar como un reloj sin necesidad de renovarse. Más de treinta años zarpando desde costas gallegas con tripulación ejemplar. Salones enormes, estética de otra época, vidrieras incluidas, barra concurrida los fines de semana y una terraza climatizada que aguanta todo tipo de celebraciones y reservas de última hora. En la mencionada barra y zona de bar con taburetes y mesas altas, cómoda y perfecta para el aperitivo sin tanta bulla ni estrecheces como en otros lugares cercanos, mucha empanada (la de chocos de la ría es un primor) y frutos del mar.  Zamburiñas, pulpo, navajas… Lo típico antes de sentarse con un caldo, un troceado de ternera o una merluza con cachelos. Las fuentes siguen siendo generosas; las recetas, a todo confort. Lugar, por tanto, para llevarse a la suegra y no fallar nunca aunque pagues tú. 

El Talgo

Ana y su marido Jorge se subieron en 2018 a esta aventura que sigue en marcha. Lo hicieron con el recuerdo de una antigua zapatería que en este mismo local de la calle Alcalde Sáinz de Baranda se llamó El Talgo. Desde entonces, al otro lado del escaparate original de los años cincuenta, siguen desplegando el mismo encanto a través de una agradable puesta en escena, entre lo industrial, lo retro y lo desenfadado, y de altas dosis de buen rollo en lo personal y en la propuesta de comida. Carta corta pero con lo suficiente para picar o montar banquete. Unas bravas y unos chicharrones chiclaneros, una ensaladilla que es emblema, alcachofas de Tudela en unas cuantas preparaciones distintas, alitas picantes, torreznos al gusto de Manuel Pardo (chef que pasó también por el Club Allard) o unas paletillas de conejo confitadas con costra de ajo, parmesano, albahaca, pistacho y mostaza Dijon. Un rincón, que además tiene terraza en el bulevar, con cierta esencia de taberna pero diferente y personal.   

Publicidad
  • Española
  • Retiro
  • precio 2 de 4
  • Crítica de Time Out
La Montería
La Montería

La Montería fue el primer restaurante de la familia Román, fundada por José Luis en 1963, que más tarde abrió La Castela donde continúa desde el 89. Es Miguel Ángel, su hijo, con cerca de 30 años al frente de este ilustre comedor del que heredó las experiencias de las primeras monterías de su padre en Cazorla, quien lo ha posicionado como un verdadero templo de la gastronomía cinegética. Es autodidacta y trabaja con absoluta dedicación y pasión por lo que hace y por el producto, siempre persigue el mejor y cuando lo tiene lo “acaricia” con los tiempos exactos de cocción. Su cocina es honesta, de mercado y sin resistencia a nada porque domina el mar y la montaña.

La Taberna de Buendi

Justo enfrente de El Capricho te darás de bruces con otro de los grandes clásicos de la zona de Ibiza y los aledaños del Parque de El Retiro. Llevan un cuarto de siglo siendo uno de los referentes del tapeo castizo, por eso te va a costar hacerte hueco en esa barra custodiada por Pepe. Aquí encontrarás una amplia selección de ensaladas y entrantes fríos, además de chacinas, croquetas, mollejitas de lechal o frituras de pescado al estilo andaluz que facilitan mucho la labor cuando vas a picar con varias personas. No obstante, si tu plan es comer sentado y en pareja, debes saber que en La Taberna de Buendi bordan elaboraciones más contundentes, como el rabo de toro, la merluza de pincho rebozada o el jarrete de cordero. Y la buena noticia es que ambos planes los tienes a tu disposición tanto en el comedor como en la terraza. Cuentan con dos locales más en Madrid que no están precisamente lejos del de Retiro (C/ Doctor Castelo, 15). Uno está en la calle Narváez y el otro en Alcántara, por si un día te apetece disfrutar de su cocina sencilla y sabrosa en otro entorno. De cualquiera de ellos vas a salir más feliz de lo que entraste, no tengas duda.

Publicidad
  • Española
  • Retiro
  • precio 2 de 4
  • Crítica de Time Out

Los sumilleres Ana Losada (La Chula de Chamberí) y David Moreno han vuelto a colgar junto a la barra una pizarra para tentar al aficionado y sorprender al neófito. A la espléndida selección vinícola le sigue una sugerente, hogareña y apetitosa carta. De las sobresalientes croquetas y la cecina para compartir a la caballa escabechada o el coquelet asado. Acertaréis con los suegros y el cuñado.

O Grelo

Hay varios restaurantes gallegos en la zona, pero O Grelo reúne todo lo que uno busca cuando le apetece degustar los mejores ejemplares de pulpo, mejillón de roca, merluza o erizo. Si a esto le sumas una bodega con más de 100 referencias (que incluye vinos de Alemania, Italia, Francia o Argentina), un local espacioso -recientemente reformado- y la experiencia que da el haber estado más de 30 años defendiendo el recetario gallego más ortodoxo, poco más habría que añadir. En la zona de bar de la entrada encontrarás mesas altas que son perfectas para ir a picar desde canapés o brochetas hasta pinchos de tortilla o incluso guisos como el de callos con garbanzos. Pero en este mismo espacio puedes degustar cualquiera de los platos de la carta, como el txangurro, la empanada de bonito o las xoubas con pimientos de Padrón. Si vas en otoño, no te olvides de preguntar por sus jornadas de la centolla de la Ría, que las celebran cada año en torno a octubre o noviembre. Es un producto que tiene un significado muy especial para el equipo de O Grelo (C/ Menorca, 39), así que ya te puedes imaginar la magnitud de este acontecimiento imperdible para los amantes de este manjar.

Publicidad

Barrio Húmedo

Si has estado alguna vez en León, ya te puedes imaginar en qué consiste la propuesta de esta “taberna española con alma leonesa”. Así es como definen ellos mismos Barrio Húmedo (C/ Menéndez Pelayo, 37), un local que homenajea a la popular zona de vinos de León a través de una carta divertida en la que no faltan cecina de vaca, ensaladilla cazurra (con congrio en lugar de bonito), bacalao con ajoarriero maragato, tosta de sardina en vinagre con pimiento de El Bierzo y otros muchos platillos que te harán viajar hasta el Húmedo a través de los sabores. El artífice de este concepto es el ingeniero Luis de Paz, nieto de bodeguero que siempre había querido emprender en el mundo de la hostelería. Gracias a él hoy podemos relamernos mientras compartimos platos de morcilla, puerros de Sahagún o esas adictivas alubias de La Bañeza que tanto se agradecen cuando aprieta el frío. Tampoco pierdas de vista su bodega, sobre todo sus referencias de Prieto Picudo, una de las uvas características de la zona. 

  • Retiro
  • precio 2 de 4
  • Crítica de Time Out
Laredo
Laredo

Una de las mejores tabernas-restaurantes para darse al placer del tapeo en la zona de Retiro. Tras mudarse un par de veces, finalmente se instalaron en la calle Doctor Castelo, en un local que cuenta con una amplia barra y un comedor por si os apetece comer más tranquilamente en lugar de tapear. Su espléndida cocina se basa en productos de temporada, así que su carta cambia constantemente.

Recomendado
    También te gustará
    También te gustará
    Publicidad