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Las Vermudas
FOTO: Maria DiasLas Vermudas

Vermut en Barcelona: los mejores lugares para tomar el aperitivo

Descubre los bares donde el sifón y el picoteo son casi una religión

Ricard Martín
Escrito por
Ricard Martín
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El vermut nunca se fue de Barcelona, pero en los últimos años la costumbre de reunirse con amigos al mediodía para compartir aperitivo y compañía está ganando adeptos y establecimientos, y siempre acompañado de las mejores tapas: bravas, anchoas, croquetas, ensaladilla...

En nuestra ciudad podéis encontrar desde las bodegas clásicas a bares que pronto serán referencia en el ritual del aperitivo, pero también otras opciones que ya son grandes clásicos de la ciudad, y sin perder de vista las nuevas incorporaciones en la escena del vermut.

NO TE LO PIERDAS: los mejores bares de tapas de Barcelona

  • Bares y pubs
  • Bares de vinos
  • El Raval
  • precio 1 de 4

¿Recordáis el Bar Iposa? Aquel bar tan bonito del Raval que apenas era un armario abierto en la pared y una terraza fantástica, justo en el patio de atrás de la Boqueria. Pues la buena noticia es que el chef Stefano Mazza, propietario del Last Monkey de San Antoni, la ha reabierto con el nombre de superclásico. El comentario siempre era: ¿Coges el Iposa? ¡Era un superclásico! Pues mira, el nombre me gusta y sea ha quedado así", comenta Mazza.

Cabe decir que por la magnificencia de la terraza -tras la Boquería, en los jardines de Dr. Fleming al amparo de la biblioteca de Cataluña y la Real la Academia de Medicina, con un parque infantil al lado- eso chutaría solo, pero Mazza ha dispuesto una oferta de comida y bebida de primera división en el apartado aperitivo. Las tapas están muy bien hechas: las bravas (4'80 €) tienen salsa de aquella bien confitada y carnosa, con ñoras, la ensaladilla rusa es cremosa y con el atún fresco, o un bollo casero con 'vitello tonnatto' fantástico. Mazza compra en la Boqueria, y se nota. Y no es que tenga vermut de la casa: es que los hacen ellos, con resultados tan excelentes como uno de macerado con cerezas y Pedro Ximénez que tiene un grado alcohólico respetable, pero pasa como el agua, u otro de exquisito y aromático con manzana y canela. Y la caña, bien tirada y a 1'80 euros.

  • Bares y pubs
  • Bares de tapas
  • Vila de Gràcia
  • precio 1 de 4

Muy vermuteros, muy guays, pero hasta ahora, Barcelona no había parido una vermutería total; un espacio conceptual dedicado a esta bebida. Pues ya lo tenemos aquí. Se llama Las Vermudas, es el corazón de Gracia y es un proyecto de cuatro socios que pueden estar contentos: son las 19.30 h de un sábado, el local está lleno y me dicen que, dentro de poco, abren una pequeña sucursal en San Antonio. Se respira vermut.

Andrea Senna y Filippo Andriol se mueven con pasión en la barra, te ilustran, te aconsejan y te descubren los secretos del desconocido universo de este líquido popular. El dúo italiano manipula un centenar de referencias de todo el mundo, tiene una colección de amaros despampanante, organizan talleres exitosos y sacan pecho con el vermut de la casa: El Cónsul. Tienen botellas de culto de todo el globo.

Y me aseguran que productores de vermut independientes van a presentarles el producto. Mientras salivo con los dados de salmón y pruebo los magníficos cócteles con vermut –sensual el daiquiri, deliciosamente amargo el asproamaro–, observo en las paredes unos mapas del país imaginario de Las Vermudas, con enclaves como el Canal de las Anchoas. Parece que ya tenemos segunda patria.

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  • Bares y pubs
  • Bares de tapas
  • El Gòtic
  • precio 1 de 4

El Chigre -una sidrería en Asturias, dicho por el artefacto para descorchar sidra- también es el bar que ha abierto el cocinero asturiano Fran Heras, del Llambies. Un lugar directo y sencillo, basado en la dualidad sidra / vermut y en el cruce Asturias / Cataluña. 

Casa Mariol Wine Bar
  • Restaurantes
  • Dreta de l'Eixample

En el local de la bodega Casa Mariol, el Casa Mariol Wine Bar, podréis encontrar el Suau, la versión actualizada de una bebida, mezcla de gaseosa y café, que triunfó en la Ribera del Ebro hace décadas. También podréis probar vinos del Ebro a granel, comer una buena clotxa —pan relleno de sardinas, cebolla, tomate y ajo— y rematarlo con unos buenos pasteles de Batea. Todo en un ambiente cool y joven.

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  • 4 de 5 estrellas
  • Bares y pubs
  • Bares de vinos
  • Gràcia
  • precio 1 de 4

Lo Pinyol es bonito (techos altos, suelos de baldosa hidráulica, una pica de mármol preciosa, seis tinas sobrevolando una barra de madera hecha a medida) y tiene tres espacios muy acogedores: la entrada-bar tradicional, una habitación interior con libros para intercambiar y un comedor al fondo para cenas más privadas. En Lo Pinyol por 3 euros tienes un vermut y una tapita buenísima a elegir entre 'esgarradet' (bacalao desmigado con pimiento rojo), crema de setas con 'rossinyol' setas encima, 'markina' (pimientos vascos fritos), alcachofa en conserva con tomate seco y boquerón.

  • Bares y pubs
  • Bares de tapas
  • Esquerra de l’Eixample
  • precio 1 de 4

El blog de los del Morro Fi fue una obra de referencia, pionera en el noble arte de glosar cañas y vermuts. De exploradores de paraísos de anchoa y secallona han pasaron a montar su propio oasis, que es todo un clásico por derecho propio. En menos de un cuadrilátero de baldosa, Marcel sirve el vermut que siempre habréis querido probar en un bar. Las cañas de Marcel esconden un secreto que sólo podréis ver si estáis muy atentos a las manos de este hombre a quien ya se le conoce como el Rimbaud de la caña. Dos dedos de justicia poética, es lo que encuentro en cada vaso.

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Quimet i Quimet
  • Restaurantes
  • Española
  • El Poble-sec
  • precio 2 de 4

Lo dicen todas las guías del mundo y siento repetirme pero Quimet y Quimet es, bueno, para que te salten las lágrimas. Tienen cerveza propia, sirven el mejor vermut de grifo del planeta y ofrecen una variedad de vinos que llega hasta el techo. Todo este cúmulo de felicidad acompaña a unas tapas que harían resucitar a los muertos.

Bodegueta Cal Pep
  • Restaurantes
  • Sants - Montjuïc

No hace falta bajar hasta la Barceloneta para tomar unas buenas tapas de pescado. Al lado del mercado de Sants, el pequeño mostrador de La Bodegueta de Cal Pep presenta una oferta de tesoros marinos irrechazable: caracoles de mar, cangrejos, navajas, percebes, mojama y otras delicatessen como los «peperini» (pimientos rellenos de anchoas o queso) y la Torta del Casar. Àngel ha mantenido el espíritu de este local que se abrió en los años 20 sin dejar de adaptarse a los tiempos modernos. Para gourmets del aperitivo.

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  • Restaurantes
  • Mediterránea
  • Sant Antoni
  • precio 2 de 4

El Calders es todo un referente de los vermuts y los vinitos de Sant Antoni. Su terraza, en un pasaje sin circulación, es una de las más cotizadas del barrio. Se crea un ambiente que hace que nunca tengas ganas de abandonar la silla. Aquí se está bien, nos quedamos a hacer el vermut, a desayunar, merendar ... De hecho, a cualquier hora sirven comida, por lo tanto, siempre seréis bienvenidos. Vermut de Reus y, para picar, tienen unos nachos completísimos, patatas gruesas con tres salsas, anchoas muy buenas, conchas, embutidos, quesos, hummus ... cerveza bien tirada y gintonics bien preparados si la cosa se os alarga y necesitáis más gasolina para acabar de rematar. Qué, ¿pedimos otra ronda?

  • Bares y pubs
  • Bares de tapas
  • Sant Antoni
  • precio 2 de 4

Bar Chiqui. Un día cualquiera a las 9 de la mañana. Vilamarí esquina con Sepúlveda, lejos y a la vez muy cerca del gueto 'hipster' que encontramos unas calles más abajo. Unos abuelos del barrio beben vino en porrón, mientras unas señoras desayunan bollería y una joven profesional come un bocadillo de atún con anchoas. Horas más tarde, toda esta gente habrá desaparecido y las mesas de este bar que encajaría perfectamente en la casilla de auténtico se llenan de tapichuelas de conservas frías y de una clientela heterogénea unida por un amor incondicional a la tradición del vermut, también, evidentemente, entre semana.

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La Bodegueta d'en Miquel
  • Restaurantes
  • Nou Barris
  • precio 1 de 4

Hace cincuenta años que esta bodega está en Nou Barris. Miquel la cogió hace cuatro años y ha querido conservar todo el mobiliario, los antiguos toneles e incluso el suelo, estropeado por el vinagre y el vino. Las mañanas de entre semana lo pueblan los jubilados. Se sientan parsimoniosos detrás de los cristales con una caña en la mano y dirigen su vista borrosa hacia la vegetación poco frondosa que son los Jardines de l'Alfàbia. Dentro de la tienda, pequeñas pizarras anuncian el precio de las latas, las conservas y las botellas, y las ofertas de la semana cuelgan de unos cubos. Los vecinos entran en la bodega con una garrafa de plástico dentro de una bolsa para que no escurra el vino. ¡Cuánto tiempo hacía que no veíamos esto! Miquel sabe muy bien en qué barrio está y nos explica que sirve anchoas, combinados... a un «precio razonable».

  • Restaurantes
  • Bar de bocadillos
  • Gràcia
  • precio 1 de 4

Ni detrás del mostrador ni en la barra encontraréis a Pepita. En cambio, sí es fácil encontrarse con Sofia o Andreu, los propietarios de un local que estira los horarios: sirven almuerzos, aperitivos, comidas (tres menús de 8, 10 y 12 euros), meriendas y cenas a la carta, donde las protagonistas son las «pepitas», inspiradas en los famosos pepitos, desde el clásico de lomo hasta combinaciones sorprendentes. La Pepita también es un local de copas, con predilección por los gin tonic (por 4 euros preparan medio vaso) y el vermut casero, a base de ginebra, naranja y sifón.

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  • Bares y pubs
  • Bodegas
  • Gràcia
  • precio 2 de 4

París tiene terrazas cubiertas y farolas de película. Nosotros tenemos bodegas escondidas como el Tano. Una puerta llena de adhesivos, mesas de mármol, el caliqueño y la chica con el periódico del domingo bajo el brazo que que se explica a tragos de vermut y bocados de anchoas, banderillas y berberechos. ¡Qué hambre pasan en París!

La Plata
  • 5 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • El Gòtic
  • precio 1 de 4

Las tres tapas imprescindibles de este emblemático bar donde deberéis comer de pie, ya os avisamos, son el pez azul frito (no en vano, también se le conoce como Los pescaditos), la ensalada de tomate, cebolla y aceitunas y el pincho de morcilla. Aquí se acaba la carta de La Plata (cabe añadir que el vermut de la casa es espléndido). Para un aperitivo, no se nos ocurre nada mejor. ¡Y ya sabes que si juntas muchso aperitivos acabas comiendo!

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  • 3 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Española
  • El Gòtic
  • precio 4 de 4

Después de muchas volteretas, el hotel Mercer reconvirtió su restaurante más informal en un bar de tapas y vermutería. Y la verdad es que la oferta vale la pena: alta gama -hotel de gran lujo cinco estrellas- a precios de barrio (y no exageramos. Sale más caro hacer un vermut en una terraza del viejo Sarrià que aquí, a 3, 50). El cocinero de la casa, Xavi Lahuerta, ha dispuesto una carta de delicatessen en formato tapa preparadas con arte, técnica y precisión (bravas, rusa de traca, berberechos al limón y patatas chips caseras). Y para beber, vermut Yzaguirre que sirven acompañado de unas adictivas, papadum, chips de garbanzos con comino. Pero también puede optar por una buena selección de vinos a copas, huyendo de lugares comunes. 'Bonus track': ¡tienen un pedazo de muralla romana!

  • 4 de 5 estrellas
  • Restaurantes
  • Esquerra de l’Eixample
  • precio 1 de 4

El Senyor Vermut es un local de barrio, del Eixample Izquierdo, para ser más exactos, un hecho que no es banal. Ya lo dice la canción escrita por el cantante más famoso de Xàtiva, que "quien pierde los orígenes, pierde la identidad". Dirigido por la familia Miralles, el Senyor Vermut tiene en el vermuteo su espina dorsal. Los que tenemos una edad recordamos a nuestros abuelos preparando el vermut del domingo donde no faltaba nunca el Martini Rosso, el sifón, los berberechos y los dados de queso La Vache qui Rit.El mediodía que volví al Senyor Vermut, la bebida del día era el Negroni y empecé por un cóctel hecho con una parte de ginebra, una de vermut rojo y una tercera de bitter, normalmente Campari. Dicen que el Negroni despierta el apetito, y así fue. La carta de tapas y platillos del Senyor Vermut no es muy diferente de la de otros magníficos lugares de tapas y platillos, pero en el local de la familia Miralles todo tiene el toque Miralles.

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La Tieta
  • Bares y pubs
  • Cervecerías
  • El Poble-sec

Garbanzos con gambas, delicionsa tortilla de patata, champiñones con ajo y perejil, olivas de campeonato, el único problema es elegir. La Tieta es una barra de mármol llena de buenos vinos, botellas de vermuy y uno de esos pocos sitios en los que saber tirar bien una caña. En la carta de vinos, no encontraréis nada clásico, un día se enamoran de un vino mallorquín y la semana siguiente están locos por uno gallego. No hacen experimentos extraños, comida de toda la vida bien hecha, sólo necesitaréis tener ganas de probar cosas buenas.

  • Restaurantes
  • La Barceloneta

Esta bodega es uno de los grandes clásicos de Barcelona para hacer un buen vermut: encontraremos unas bombas de primera categoría, tortillas de patatas melosa, vermut casero y una ensaladilla rusa de aquellas que crean afición. Trato cercano y muy amable.

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  • Bares y pubs
  • Bares de tapas
  • Sant Pere, Santa Caterina i la Ribera

A pesar de la presión turística, esta bodega del Born ha sabido mantener su personalidad. Desde 1929, entonces con el nombre de Ca l'Esteve, la gente se acerca para probar unas excelentes anchoas, un jamón superlativo y sobre todo para beber el vino blanco espumoso que le da nombre. En hora punta no cabe ni un alfiler, o sea que es mejor ir temprano.

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