Máquinas de coser
Foto: Eugènia Güell
Foto: Eugènia Güell

Los museos más curiosos de Barcelona

Divertidos, extravagantes, y a la vez interesantes. Son los otros museos de la ciudad

Rita RoigXavi Casinos
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¿Los museos canónicos de Barcelona? El Picasso, la Fundació Miró, el MACBA, CaixaForum y la Tàpies, entre otros, pero Barcelona tiene unos cuantos más pequeños y desconocidos. Algunos, técnicamente, no son museos ni están reconocidos como tales, pero reúnen unas colecciones de gran interés y de diferentes especialidades: desde perfumes a máquinas de coser, desde fósiles prehistóricos a objetos de tribus africanas y amazónicas, de la historia de la peluquería a los Mossos d'Esquadra. Son los otros museos.

No te lo pierdas: las mejores exposiciones de la ciudad.

10 museos desconocidos que te dejarán la boca abierta

1. Museu Palmero

Una espectacular masía del siglo XV en el barrio de Sant Genís dels Agudells es la sede del Museo Palmero, que reúne la prolífica obra del pintor Alfredo Palmero, pero también de su hijo y nieto, también de nombre Alfredo como el abuelo. La familia Palmero compró la masía a principios de los 70 en estado casi de ruina para dedicarla a taller y museo. Poco a poco, fueron rehabilitando y hoy está declarada monumento artístico. En la masía se pueden admirar cientos de cuadros y antigüedades adquiridas durante estos años. Alfredo Palmero abuelo tuvo en los caballos uno de los elementos claves de su obra, muy reproducida en los comedores de casa. La masía también tiene una cueva en la que, dice la leyenda –y sólo la leyenda–, se escondió Joan de Serrallonga.

2. Museu Africà Daniel Comboni

Más de 400 objetos procedentes de una cuarentena de países conforman la colección del pequeño Museo Africano Daniel Comboni, en Horta. Todas las piezas han sido llevadas por los misioneros de la orden de los Hijos del Corazón de Jesús, fundada en 1878 por religioso que le da nombre. El museo, inaugurado en 1992, es anexo a una torre en la que viven los combonianos desde hace más de 50 años. A través de su colección, se puede realizar un recorrido por la historia de África, desde la prehistoria. Buena parte de las piezas son máscaras, entre las que destacan una de iniciación a la edad adulta de un joven de la tribu de los bakuba, en el Congo, y una hecha con la cabeza de un tiburón (foto) de la tribu bidyogo, en Burkina Faso.

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3. Museu d’Opisso

El hotelero Jordi Clos ha convertido la planta baja del Astoria en un santuario dedicado al dibujante y caricaturista catalán Ricard Opisso. Clos es el más importante coleccionista de la obra del artista. Empezó en 1967 y en estos momentos ha conseguido reunir más de 250 obras del artista, considerado, además, un imprescindible cronista gráfico de Barcelona. El hotelero decidió en 2003 consagrar a Astoria al genial dibujante. Entre el fondo, destaca la colección dedicada a Barça y Espanyol que había sido propiedad del expresidente del COI Joan Antoni Samaranch. También dos dibujos de alto contenido sexual que Opisso firmó como Bigre. Para verlas, debe abrirse una pequeña puerta que tapa los dibujos.

4. El Museu de les màquines de cosir

No es un museo, pero podría serlo. En este local de Sants, cuyo responsable tiene casi permanentemente abierto, se acumulan unas 250 máquinas de coser de todas las épocas y marcas conocidas. Están por todas partes: sobre las mesas y alineadas en las estanterías. Bernabé Martínez, el propietario del local y de la colección, nunca niega la entrada a nadie, orgulloso de todas las máquinas que ha acumulado a lo largo de los años. Todas las máquinas funcionan. La más antigua es una de la marca Aurora, fabricada en Barcelona en 1860. Pero también existen modelos que fueron muy populares entre nuestras abuelas: Wertheim, Singer, Alfa y Brother, marca con la que Bernabé se inició, como en comercial, en el mundo de las máquinas de coser.

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5. Museu Etnogràfic de l’Amazònia

Se encuentra dentro del monasterio de els Caputxins de Sarrià  y lo integran una colección de piezas obtenidas por los misioneros catalanes en la Amazonia. El museo, instalado en el antiguo refectorio, no está explícitamente abierto al público, pero puede visitarse concertando una cita. Se remonta a 1911, cuando el fraile Miquel d'Esplugues pidió permiso para crear un museo etnográfico para dar a conocer la Amazonia a la sociedad catalana. Y fue cómo fueron llegando cientos de objetos de las distintas tribus. Escudos, vestidos, tambores y todo tipo de granaduras pueden verse en esta colección excepcional, que fue destruida durante la guerra civil. Sólo sobrevivieron dos cabezas de piedra que aún pueden admirarse en el museo, reabierto en 1975.

6. Museu del Perfum

Más de 7.000 frascos de fragancias, desde el antiguo Egipto hasta el año 2000. Esta es una de las colecciones más completas de esencias reunidas en un insólito museo en la trastienda de la perfumería Regia, en pleno paseo de Gracia. La familia Planas, propietaria del negocio, decidió abrir el museo en 1961, aprovechando parte del stock de antiguos perfumes que acumulaban desde que habían abierto la primera tienda Regia en la calle Casp. Pero la chispa fue el regalo que les hicieron de una antigua ánfora fenicia llena de esencias que todavía se puede admirar en el museo. Fue entonces cuando empezaron a localizar y comprar piezas históricas. Entre los frascos más singulares, hay dos en forma de libro que pertenecieron a Maria Antonieta.

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7. Museu de la Perruqueria

Antiguos y siniestros secadores de pelo de casco y máquinas para hacer permanentes son los objetos que puede ver cuando entra en el Museo de la Peluquería, dentro de uno de los salones del desaparecido Raffel Pagés. De entrada, podría creer que está visitando un museo de la tortura. Pero no. Puede hacer un recorrido por la historia de la peluquería, desde el Neolítico hasta nuestros días, gracias a la colección que había acumulado en vida el prestigioso estilista. Encontraba los objetos en subastas y anticuarios. Entera, son más 10.000 objetos y libros de los que sólo hay expuestos unos 500. Hay cabellos de Napoleón, de Luis XVI y de Maria Antonieta. También de Elvis, Beatles y Marilyn Monroe, y una enorme peluca en forma de Sagrada Familia que fue récord Guinness en 1992.

8. Museu Paleontològic

Este 2024 cumplirá 150 años que existe. Está en el interior del Seminario Conciliar de Barcelona y reúne una de las colecciones más importantes de fósiles de invertebrados que se conocen. Aunque está especializado en invertebrados, también conserva los restos de un mastodonte encontrado en 1965 en Polinyà. Es referente en paleontología sobre todo por su 'typotheca', una colección de holotipos de invertebrados, que son los ejemplares de referencia a partir de los que se describe una especie. El museo, fundado en 1874 por el religioso y geólogo Jaume Almera, tiene unos 700, por lo que es una visita obligada de los expertos, así como la biblioteca, que incluye ejemplares únicos sobre la materia.

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9. Museu dels ‘eolos’

El edificio de la Comandancia Naval conserva un curioso museo, el que recoge la historia de la asociación de los eolos. Esta entidad reunía a quienes en su día habían hecho el servicio militar en el 'Eolo', un antiguo barco minador que entre 1947 y 1956 estuvo atracado en el Moll de la Fusta. Se trataba de un destino muy preciado y hacían la mili los enchufados, ya que era como hacerla en casa. La asociación nació en 1950, a raíz de una cena de compañeros de reemplazo, y pronto se hizo extensivo a todos los que habían servido en el 'Eolo'. En 2011, la Comandancia Naval les cedió un espacio donde poder reunir recuerdos, fotos y documentación diversa. Hoy, ya no queda ningún miembro vivo de la entidad, pero su recuerdo sigue en el pequeño museo.

10. Museu dels Mossos

Hace poco más de tres siglos se creó el cuerpo de los Mossos d'Esquadra, después de la Guerra de Sucesión. Para conocer su historia, es imprescindible acudir al museo que se encuentra en la sede de la comisaría de Sant Andreu: 1.400 piezas históricas y 14.000 fotos y documentos son el grueso de la colección. Fue creado en 2012, y, inicialmente, estuvo en la escuela de policía de Mollet, pero en 2016 se trasladó a Sant Andreu. Destacan la colección de uniformes de todas las épocas, insignias y armamento diverso. La pieza más antigua es una chaqueta de 1875. El museo se alimenta de donaciones de familias de antiguos agentes y con la adquisición de elementos históricos.

  • Lugares de interés
  • Bibliotecas, archivos y fundaciones
  • Eixample

La vida de Joan Proubasta está ligada a la de Sherlock Holmes de manera casi mágica. A los 13 años, cuando estudiaba en Francia, compró su primer libro protagonizado por el detective. En Barcelona siguió con la afición, con la complicidad de amigos y familiares, hasta reunir la colección más importante de España y una de las diez mejores de Europa. La forman más de 6.000 libros y más de 2.000 objetos entre pósters, sellos, casetes, marionetas, tazas... podéis descubrirla en las exposiciones temporales que se organizan o con las visitas que ofrecen los de Casas Singulares.

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  • Museos e instituciones
  • Vallvidrera, el Tibidabo i les Planes
Museu dels autòmats
Museu dels autòmats

En este curioso museo del Parque de Atracciones del Tibidabo se pueden encontrar desde ejemplares de finales del siglo XIX y principios del XX, hasta adquisiciones más recientes como 'Los hermanos Gaüs o el equilibrio del mundo', una pieza finalista del concurso de autómatas de la Exposición Universal que se celebró en 2005 en Aichi (Japón).También hay muñecos que funcionaban con monedas y que se podían ver en las ferias de toda Europa, o también algunos juegos y juguetes mecánicos con los que se distraían los niños en otras épocas.

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  • Qué hacer
  • Barcelona

Un viaje por la industria y la cultura del automóvil en este museo de 1.500 metros cuadrados dedicado a los vehículos clásicos y antiguos. En total atesoran 90 coches, motocicletas y accesorios de Europa, los Estados Unidos y la antigua Unión Soviética.

  • Qué hacer
  • Barcelona

Esta colección de carrozas fúnebres se creó en 1970 y está formada por 19 piezas originales: 13 carrozas fúnebres, 6 coches de compañía y tres coches a motor. Es la única colección de este tipo que hay en toda Europa, por lo que, a parte del morbo que pueda despertar en algunos, es un patrimonio artístico, cultural y antropológico muy valioso.  

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  • Museos e instituciones
  • Historia
  • Sant Pere, Santa Caterina i la Ribera

Seais golosos o no, merece dedicarle parte de vuestro tiempo. Está lleno de esculturas de chocolate para todas las edades hechas por los maestros pasteleros de la ciudad: desde la Casa Batlló de Gaudí hasta los personajes de la última película de Pixar o clásicos de Disney. Los documentos audiovisuales y los ordenadores táctiles explican de una manera divertida la historia del cacao, desde sus orígenes a su llegada a Europa. Reservad con antelación si quieres hacer uno de los cursos para aprender a hacer figuras de chocolate y postres deliciosos. 

  • Lugares de interés
  • El Gòtic

Se encuentra en La Rambla y seguramente no es lo que os puede venir a la mente en un primer momento. Se exponen ilustraciones del Kama Sutra, pinturas con aerógrafo de criadas desnudas y objetos raros y fascinantes como cinturones de castidad o un bastón victoriano con una vagina de marfil en la parte superior. Otras rarezas son los dibujos japoneses, una silla de placer y fotos de los burdeles del Barrio Chino de los años 30.

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  • Lugares de interés
  • El Gòtic
Hemp Museum Gallery
Hemp Museum Gallery

La colección del Hash Marihuana & Hemp Museum consta de más de 6.000 artículos relacionados con el cannabis. Desde el cultivo hasta el consumo o desde rituales antiguos a la medicina moderna, cada aspecto del cannabis en la cultura humana está representado de alguna manera. También organizan exposiciones temporales.

  • Museos e instituciones
  • Interés especial

De tanto coleccionar, Sören Manzoni ha abierto el primer museo del skate en España con más de 1.000 monopatines. El DJ y exproductor de Nasty Mondays tiene el único ejemplar en Barcelona del skate de 'Regreso al futuro', pero este garaje es un regreso al pasado: máquinas recreativas, robots, televisiones antiguas y nostalgia de los 80. 'Tengo 50 años y siempre he tenido un monopatín bajo los pies. Habrá quien simplemente verá muchas cosas, pero con esto yo quiero transmitir lo que soy'. ¿Y donde está? Un poco de misterio siempre va bien. Para acceder al espacio, hay que enviar un e-mail a manzonisgaragebcn@gmail.com, y te mandarán la dirección exacta.'.

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  • Museos e instituciones
  • Historia
  • Ciutat Vella
Museu de Cera
Museu de Cera

No es el Madame Tussauds, pero el museo no está mal. Es una buena idea para una tarde de lluvia o una salida con niños: les encantará el submarino y el viejo buque. Te advertimos, ya de antemano, que las exposiciones son un poco casposas (en el fondo como cualquier museo de cera) y la mezcla de personajes históricos con otros de los años 80 puede resultar chocante (imaginaros a compositores del siglo XIX con ET, personajes de Star Wars, JR o Lady Di).Para acabar la jornada, id a tomar algo a El bosc de les fades, la cafetería temática del museo, que bien merece una visita aunque no consumáis.

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