Los mejores spas de Barcelona

AIRE Ancient Baths Barcelona no es solo un spa, es un viaje sensorial bajo tierra en pleno Born. Imagina sumergirte en aguas templadas, calientes o heladas entre muros de piedra del siglo XVIII, luces tenues, silencio absoluto y aromas envolventes.

Inspirado en los antiguos baños romanos, griegos y otomano, este templo del bienestar convierte un antiguo almacén en una experiencia que apaga el ruido de la ciudad y reconecta contigo desde el primer minuto.

Olvida todo lo que sabes sobre spas. Bajo la dirección del mexicano Manuel de la Garza y con la sabiduría ancestral de su bisabuelo, sacerdote maya, este santuario del centro de Barcelona es un viaje místico sin salir de la ciudad.

Reconocido por la Guía Michelin 2024 y multipremiado por los World Luxury Spa Awards, este lugar lo tiene todo: lujo, espiritualidad e incluso un pequeño museo con piezas mayas auténticas que te transportan a otra dimensión.

Si el paraíso existiera en formato spa, estaría dentro de este hotel. Un refugio de lujo pensado para quienes quieren desconectar en serio, con una piscina interior climatizada de 12 metros, sala de vapor, zona de relajación y una terraza con piscina exterior que da directo al cielo de Barcelona. Todo acompañado por terapeutas expertas y un ambiente que susurra 'date un respiro' desde que entras.

Aquí el cuidado personal se eleva a arte. La carta de tratamientos es tan completa como irresistible: exfoliaciones, rituales faciales, masajes con aceites aromáticos o efecto detox, y terapias posturales que dejan el cuerpo como nuevo. 

A solo unos pasos del bullicio del Portal del Ángel, el hotel Yurbban Passage esconde un secreto de calma total: el Signature Organic Spa, uno de los spas más cuidados (y mejor valorados) de la ciudad.

Con un circuito de aguas y piscina interior, este refugio urbano mezcla tradición y diseño moderno, y te ofrece tratamientos realizados con productos orgánicos y veganos que respetan tanto tu piel como el planeta. ¿El plan perfecto? Spa, piscina en la azotea con vistas y una buena comida catalana sin salir del hotel.

El spa del Hotel Rey Juan Carlos I está a la altura del prestigio del hotel en todos los sentidos: desde las instalaciones, amplias y luminosas, hasta el personal, que es encantador. En la zona de spa se accede a través de los vestuarios. Hombres y mujeres, por tanto, están en espacios diferentes. No falta de nada: sauna, piscina fría y caliente, duchas a presión y un largo etcétera. La decoración recuerda a los padres del invento: los romanos y sus términos. El spa se puede complementar con masajes, gimnasio o, si lo prefieres, puedes tumbarse en la piscina cubierta con un paisaje mediterráneo de fondo.

Viniendo del bullicio de la calle, lo primero que percibirás será el intenso aroma a rosas y la música hipnotizante. Detrás de su modesta entrada, Rituels de Oriente esconde un pequeño paraíso, un hammam que consta de dos salas: la primera está a 37 grados y el calor proviene de la calefacción de bajo tierra, la otra está a 46 grados y manda el vapor. Lo más recomendable es sentarse y pasar el tiempo yendo de un espacio a otro. Elimina toxinas y mejora la circulación sanguínea. Hay horario exclusivo para mujeres y otro de mixto.

Disfruta de un pedacito de Bali cerca de ti en el único spa tradicional balinés en nuestro país. Bali Spirit Luxury Art Spa, creado por artistas y compositores de música, ha sido premiado en 2016 como 'Best Spa Concept'. Se inspira en las antiguas tradiciones balinesas, mezclando los sentidos con el arte, floreciendo desde la mente y el corazón.

Ubicado en la tierra de nadie de los alrededores de la nueva plaça Europa del Hospitalet (en el centro comercial Gran Vía 2 y el Ikea), el Fira Congress es uno de los hoteles de lujo destinados a los usuarios de la nueva feria de Montjuïc. Con una ocupación discreta, sus instalaciones modernas (piscina de hidromasaje, hamacas calientes, sauna, baño de vapor y gimnasio), están abiertas (con cita previa) a los ciudadanos estresados ​​tras pelearse para conseguir una estantería Markör. El circuito de aguas es libre cuando se hace un tratamiento.

El grupo Serena Spa cuenta con tres spas en Barcelona, dentro del Hotel Melià Barcelona Sky, el Hotel Melià Sarrià y el Hotel Grums. Se realizan masajes corporales, tratamientos faciales, circuitos de aguas y tratamientos de belleza, entre otras muchas opciones.

Este gimnasio de la cadena Metropolitan es un complejo moderno, amplio y lujoso, y la enorme zona de aguas es el principal atractivo (mucho mejor que las bicis de spinning, ¿no?). En los vestuarios encontraréis una bañera de hidromasaje, un baño turco y una sauna, pero es que en la zona común hay una piscina con efectos termolúdicos, sauna con televisor interior, bañera de hidromasaje, hammam, ducha bitérmica y de vapor y fuente de hielo, todo ello aparte de las dos piscinas. 

Como el útero materno. No es exactamente un spa, de acuerdo, pero también sirve como tratamiento relajante acuático. Imagínate una gran cápsula llena con 600 litros de agua (donde hay disueltos 300 kilos de sales curativas) en la que te puedes cerrar herméticamente, sin luz, ni sonido, ni tacto, ni ningún estímulo exterior. El aislamiento sensorial es absoluto y la sensación de ingravidez hace que al cabo de veinte minutos empieza a generar endorfinas y se siente muy relajado a nivel físico y mental. No pienses que es automático: sinceramente, cuesta desconectar de los problemas terrenales, pero nos aseguran que con la práctica cada vez es más rápido soltarse. Si os quedáis dormidos, no passa nada, vas a flotar.

Situado donde estaba el antiguo Club Natació Barceloneta, este polideportivo municipal de la Fundación Claror es el primer centro de talasoterapia de Cataluña, es decir, que utiliza el agua de mar-muy beneficiosa para la piel y con una capacidad muy alta de flotabilidad-de manera terapéutica. Hay cinco piscinas de agua dulce y salada con diferentes temperaturas y surtidores de agua de presiones diversas. Los precios son populares y abonarse es la opción más económica.