
Locales de Madrid que han cerrado y echaremos de menos
Ya sea por la crisis sanitaria, problemas de alquiler o por jubilación, estas tiendas y restaurantes no volverán a levantar la persiana
Tras varios meses cerrados por el confinamiento, no todos los comercios de la ciudad han logrado sobreponerse y algunos han tenido que bajar la persiana para siempre. Desde pastelerías de estilo francés hasta papelerías centenarias o restaurantes que forman parte de cadenas internacionales, la crisis sanitaria ha hecho estragos entre el comercio local de la ciudad, y otros establecimientos se han visto con dificultades (fin del contratro de arrendamiento, jubilación de sus propietarios, etc.) para seguir adelante. Con todos ellos perdemos una pizca de la esencia de la ciudad.
RECOMENDADO: Time Out apoya el ocio y la cultura local.
Museo ABC de Ilustración
Malas noticias para los amantes de la ilustración, el cómic y el arte en general. El Museo ABC de Ilustración, ubicado en el número 29 de la calle Amaniel, cierra sus puertas por decisión del grupo Vocento. Se trata del único Museo de ilustración y cómic en España, lo que convierte el cierre en algo aún más triste para el panorama cultural madrileño.
El Pavón Teatro Kamikaze
No han resistido los golpes constantes de la pandemia. Los responsables acaban de comunicarlo a los medios. El Pavón Teatro Kamikaze, Premio Nacional de Teatro 2017 por la singularidad de este proyecto conjunto, cierra definitivamente sus puertas el 31 de enero dejando tras de sí un reguero de premios a sus producciones propias.
Hontanares
Llevaba en la plaza de la avenida de América desde 1966 y ahora, por culpa de la covid-19 y las cuantiosas pérdidas económicas, se ha visto obligado a cerrar sus puertas definitivamente. Es el bar cafetería y pastelería Hontanares, un referente en esta zona de Madrid desde hace más de 50 años.
Zalacaín
Ni la millonaria reforma que hicieron hace tres años para llamar la atención de nuevos clientes ni su más próximo salto al servicio a domicilio bajo la marca ByZeta ha sido suficiente para librarse del terremoto que la covid-19 y las obligadas restricciones impuestas para frenarla ha desatado en el panorama de la restauración capitalina. Zalacaín, esa gran casa fundada por el navarro Jesús María Oyarbide en 1973 y la primera en lograr tres estrellas Michelin en nuestro país, cierra definitivamente sus puertas.
Melo's
¿Alguien en la sala quiere hacerse con el mítico Melo's? Se alquila en idealista. Esta vez no ha sido el virus sino la edad de jubilación la que ha bajado la persiana de otro querido local, una taberna legendaria de Lavapiés y todo un referente para todos los bolsillos ajustados en el panorama hostelero de la capital. Esas sí eran zapatillas (lacón y queso fundido a cascoporro) y no las ediciones vintage que venden ahora a precios desorbitados. ¡Qué dimensiones tenía todo!
Marula Café
Refugio para todos los más noctámbulos que andaban pasada la medianoche por las calles de La Latina y referente para muchos otros que se movilizaban hasta aquí para disfrutar de su programación, Marula Café quizás no haya podido resistir los golpes de la pandemia y acaba de comunicar su cierre después de 18 años alargando las noches junto al viaducto de Segovia. "Ahora llega el momento de despedirse. Lo hacemos con el orgullo de quien ha dado lo mejor de sí mismo", ha declarado en un comunicado oficial.
99 KO Sushi Bar
La niña bonita, el ojito derecho, la máxima expresión del Grupo Bambú, con más de 13 años de trayectoria y otras cinco direcciones en Madrid, no volverá a abrir sus puertas. La barra donde cada día oficiaba un experimentado David Arauz, junto al sushiman Héctor Escalona, no desplegará más sus exclusivos y sobresalientes nigiris. Uno de los mejores restaurantes japoneses de la ciudad no le ha ganado el pulso al coronavirus. Lo han anunciado ellos mismos en sus redes sociales. "99 KO Sushi Bar, obligado a echar el cierre por una cuestión de centímetros".
Punto MX
El prestigioso chef Roberto Ruiz ha decidido echar el cierre a su espacio de alta gastronomía tras ocho años de trayectoria y decenas de platos sublimes (como los de su último menú degustación 'Fondas de Ciudad de México'). Madrid se queda sin el único restaurante mexicano que lucía una estrella Michelin, que no había abierto desde que bajó la persiana por la pandemia. Cierra Punto MX y su rincón para entregarse al cóctel de autor y el picoteo de altura, Mezcal Lab.
Vintalogy Atocha
Está claro que las pandemias no son buenas para los negocios. El último en echar el cierre ha sido Vintalogy, la que naciera hace solo dos años como la tienda de segunda mano y moda vintage más grande de Europa. La buena noticia es que los motivos económicos no han sido la causa principal del cierre de esta 'mega store' de más de 800 metros cuadrados. "La propiedad del local, que es la misma que la del edificio, ha querido recuperarlo". Razón por la que Vintalogy no ha vuelto a subir la persiana. Sí lo han hecho sus otras tiendas: los Vintalogy de la calle Barceló e Infantas, ahora reconvertido en tienda especializada en zapatillas de coleccionista (Archive Sneakers), el del centro comercial XMadrid y su nuevo local en el barrio de Salamanca, Terapia Vintage, dedicado a las grandes firmas del lujo.
Casa Patas
36 años después de su apertura, el mítico Casa Patas ha anunciado que echa el cierre. Ni los premios conseguidos a lo largo de todo este tiempo (premio Enrique Malla por su contribución y difusión del flamenco en Madrid), ni sus más de 300 espectáculos anuales, ni los artistas de renombre que han pasado por sus tablas (de Camarón a Miguel Poveda, además de Diego el Cigala, José Mercé, Paco de Lucía, Joaquín Cortés, Niña Pastori o Tomatito), han conseguido salvarle de la crisis.
Papelería Salazar
Cierra la papelería más antigua de Madrid, Salazar (Luchana, 9) en el barrio de Chamberí. Y, aunque lo parezca, esta vez la culpa de todo no la tiene la pandemia por la crisis sanitaria del coronavirus, sino también algo tan legítimo como necesario: la jubilación de sus propietarias. Ana y Fernanda, biznietas de la fundadora, dicen adiós a más de 50 años de trabajo al frente de esta papelería que comenzó como estanco a principios del siglo XX y acabó teniendo hasta una imprenta propia en los años 50.
Hard Rock Café
Hard Rock Café Madrid abrió sus puertas junto a la plaza de Colón en 1994, en una inauguración a la que asistió la leyenda del rock n' roll, Chuck Berry. Y casi 30 años después, la cadena de restauración internacional consagrada a la historia del rock dice adiós a esta mítica localización tras finalizar el contrato de arrendamiento del local.
Mamá Framboise
Con seis locales repartidos por toda la ciudad, el pastelero Alejandro Montes (Mejor Pastelero Joven de España en 2006, Mejor Chocolatero de España 2007) se ha visto obligado a cerrar Mamá Framboise para siempre. Su empresa, un híbrido de pastelería-panadería-café que arrancó en la ahora muy codiciada zona de Las Salesas (Fernando VI, 23), quizás sea la más dulce víctima en el sector hostelero que se ha cobrado la pandemia hasta la fecha.
Calzados Cantero
Esta zapatería llevaba 64 años abierta en uno de los esquinazos de la plaza de Olavide, despachando alpargatas a vecinos y turistas, y viendo crecer el barrio con el paso de los años. El negocio iba bien, pero los tres meses que han tenido que estar cerrados por la crisis sanitaria que ha provocado el coronavirus, les ha hecho mella.
Almacenes Aragón
¿Os habéis fijado en esa tienda de ropa de hogar que hay junto a las puertas rojas del Teatro Lara, en la Corredera Baja de San Pablo? Se trata de Almacenes Aragón, un negocio centenario que lleva en pie 101 años (justo acaba de estrenar la placa que otorga el Ayuntamiento como reconocimiento) y que, sin embargo, echa el cierre. De hecho, ya lo ha hecho. El pasado 30 de junio fue su último día abierto al público, para sorpresa de vecinos y fieles clientes.