Dentro el club privado Las encinas pero accesible también para los no socios (previa reserva; de hecho los sábados y domingos el servicio de comida tiene aforo limitado para los no socios) se despliega una terraza sobre un pequeño y bucólico lago. Se encuentra a veinte minutos de Madrid, en Boadilla del Monte, y puede ser un plan perfecto para descubrir con la familia cualquier fin de semana de esta primavera/verano. El espacio, un 3 en uno (restaurante, chill out y beach club) de manual, se despliega en un entorno idílico y sosegado y funciona para ir a comer o cenar igual que para ir a tomarse una copa al atardecer. De sus fogones salen platos mediterráneos pero también hacen algún guiño internacional reconocible (un taco por ahí, una alga wakame por allá). Pero quizás su fuerte sean los platos de pescado y las carnes a la brasa. Pero la carta está diseñada para contentar todos los gustos (también los de los más pequeños). Hay desde arroces a hamburguesas pasando por un cachopo o unos torreznos a baja temperatura.
Lagos artificiales, embalses, piscinas, fuentes, ríos... todo vale para sumar un punto más de relajación y disfrute alrededor de una mesa, para descansar con las vistas o el cercano sonido del agua. Y aquí tenemos sitios para un brunch, para una comida familiar, para sorprender a tu pareja o para simplemente tomarte un cóctel y coronar el tardeo.