Tiene más de 7.000 años de historia pero Malta es, probablemente, el gran desconocido entre los destinos de costa de Europa. Y a solo dos horas de vuelo desde Madrid. El archipiélago con el mejor clima del Mediterráneo, está formado por tres islas (Malta, Gozo y Comino) y juntas con la combinación perfecta, y a tamaño reducido, de historia, arte, patrimonio, arqueología, deportes acuáticos y paraísos por descubrir más allá de La Valetta (la histórica capital), Mdina (la hermosísima ciudad amurallada que parece haberse detenido en el tiempo) o Rabat (un laberinto lleno de historia, y más de mil catacumbas). Si de lo que se trata es de ir en busca del sol de invierno, el destino final debe estar en la isla de Comino, al norte del archipiélago, un oasis de aguas azul turquesa y arena blanquísima en el que se encuentra la laguna azul o Blue Lagoon, un paraíso que cautiva tanto a quienes van para practicar snorquel o submarinismo (principales atractivos en verano) como a quienes solo quieren disfrutar de un baño de playa idílico en invierno.