La reapertura del Bar Alegría –precioso local modernista de 1899 en Gran Vía con Borrell– fue azarosa. El segundo día de la nueva propiedad, en julio de 2019, los socios de renombre (Carles Abellán y los 'Xemei' Colombo) se retiraron del proyecto y las obras a pie de calle lo convirtieron en una ratonera. "Y yo les propuse de quedármelo entero y poder hacer lo que quisiera", explica Tomás, hijo de Carlos y ex manager de La Barra.
"Antes era más bar, y he querido que fuera más restaurante", explica Abellán hijo. ¿Tapas? Hacemos cocina de Barcelona, una suma de pescado de lonja, huerta, guisos y tapas ", resume. En lugar de ponernos a cazar QRs, han colocado dos pizarras por donde desfila producto fresco y de gama alta –no tienen nevera– en raciones abundantes. La terraza es espectacular, de aquellas que han quedado incrustadas en el subconsciente colectivo durante generaciones. Haz tu reserva en baralegria1899.com